Ópera de Beijing [Foto de tuchong.com]
La Ópera de Beijing, también conocida como Ópera Ping y Ópera Jing, es el género más influyente de las óperas chinas, se distribuye principalmente en Beijing y se extiende por todo el país. Desde el año cincuenta y cinco de Qianlong en la dinastía Qing (1790), cuatro grupos de ópera de la provincia de Anhui que actuaron originalmente en el sur: Sanqing, Sixi, Chuntai y Hechun, entraron en Beijing uno tras otro, adoptaron algunos repertorios, melodías y métodos de interpretación de la ópera Kunqu y la ópera Qin, absorbieron algunas melodías populares locales y, a través de la comunicación y la integración continuas, finalmente se formó la Ópera de Beijing.
La Ópera de Beijing tiene un conjunto de expresiones artísticas estandarizadas en diversos campos como la literatura, la representación, la música y el arte escénico. Los papeles de la Ópera de Beijing se dividen en Sheng (personaje masculino), Dan (personaje femenino), Jing (personaje masculino dotado de una gran fuerza de voluntad), Chou (personaje bufón de la obra), Za (responsable de trabajos auxiliares), Wu (personaje masculino militar), Liu (personaje auxiliar), etc. El canto es una variante del compás del estilo tablero y se toman Erhuang y Xipi como tonos básicos principales. El acompañamiento musical de la Ópera de Beijing se divide en dos tipos: Wen Chang, en el que se usan los instrumentos de orquesta y el Huqin (un instrumento de cuerda con arco utilizado en la música china) se convierte en el instrumento principal, y Wu Chang, en el que se usan los instrumentos de percusión y el Guban (un instrumento compuesto por tambor y tableros) se convierte en el instrumento principal.
Los diferentes colores en el maquillaje facial de la Ópera de Beijing representan distintos caracteres de los personajes: la cara roja tiene sentido positivo y representa lealtad y coraje; la cara negra es neutra y representa fuerza y sabiduría; la cara azul y la verde también son neutrales y representan a héroes salvajes; la cara amarilla y la blanca tienen sentido negativo y representan crueldad y maldad; la cara dorada y la plateada tienen sentido misterioso y representan a dioses y monstruos.